
Cuando te comunicas con los demás ¿para que lo haces?,¿qué esperas de la otra persona?. La comunicación es la base de nuestras relaciones sociales. La manera en la que nos comuniquemos marcará nuestra vida social dependiendo de si realizamos una comunicación efectiva y sana o una comunicación dañina e insana. ¿Cómo podemos comunicarnos de manera efectiva incluso en los momentos de discusión o conflicto?
Los seres humanos nos comunicamos a través de la palabra, tanto hablada como escrita. Posiblemente esta capacidad del lenguaje sea la que más nos diferencia del resto de seres vivos.
Es imposible no comunicarse: Todo comportamiento es una forma de comunicación . Paul Watzlawick
Pero comunicarnos no consiste solo en dar una información a otro sino que somos los responsables del tipo de comunicación que decidimos utilizar y por lo tanto, de los resultados obtenidos.
Para mejorar nuestra comunicación podemos aprender y desarrollar una serie de destrezas comunicativas. Para ello se requiere:
– Un Entrenamiento Conductual, para adquirir comportamientos específicos que incrementan la probabilidad de una mejor comunicación
– Un Entrenamiento Cognitivo, para identificar y reemplazar pensamientos “irracionales” ( disfuncionales ) sobre uno mismo, las otras personas y el mundo en general, por otros “racionales” ( más efectivos).
El entrenamiento conductual por sí solo no es suficiente, ya que la persona puede haber adquirido las habilidades sociales necesarias para actuar, pero no permitirse utilizarlas.
Existen varios estilos de comunicación, donde el estilo pasivo y el estilo agresivo, o una combinación de ambos (estilo pasivo-agresivo), dificultan la relaciones entre las personas, mientras que el estilo asertivo ofrece una alternativa eficaz y facilitadora.
ESTILO PASIVO:
La persona que utiliza este estilo a la hora de comunicarse con los demás , sacrifica la expresión de los deseos propios para evitar el conflicto.Ejerce una cierta manipulación al hacer recaer la responsabilidad de las decisiones en la otra persona.
Evita expresar sus sentimientos, su opinión y sus preferencias por miedo a ser rechazado, por ser demasiado incómodo, o por miedo a no expresarse perfectamente y herir al otro. Eso le conduce a sentirse ansioso, desilusionado consigo mismo, resentido y enfadado después de la interacción.
Suele provocar en los demás sentimientos de culpa o superioridad hacia sí mismos.
El resultado que finalmente obtiene la persona que utiliza este estilo de comunicación es precisamente no obtener lo que quiere, haciendo que vaya acumulando un sentimiento de rabia.
ESTILO AGRESIVO:
El comunicador agresivo resuelve el conflicto al imponer los deseos propios por encima de los de la otra persona. La persona que utiliza este estilo suele manipular mediante el sarcasmo y la crítica. Suele utilizar un estilo autocrático.
Este estilo de comunicación dificulta la expresión de los sentimientos, la opinión y las preferencias de la otra persona.
La persona que utiliza este estilo suele obtener lo que quiere a expensas de los otros. Pero el interlocutor suele sentirse humillado y herido por lo que puede terminar teniendo reacciones de venganza.
ESTILO ASERTIVO:
La persona resuelve el conflicto respetando los derechos propios y los de la otra persona. A la hora de expresar sentimientos, preferencias y opiniones lo hace de manera directa y honesta.
Este estilo asertivo de comunicación ayuda a la persona a establecer interacciones sociales basadas en el respeto mutuo. Ayuda a sentirse seguro de sí mismo y el interlocutor se siente respetado y valorado.
La asertividad es el tipo de comunicación que suele darse en personas de sana autoestima y alto grado de gestión emocional.
Desde el área de Educadhin desarrollamos programas prácticos tanto individuales como grupales para desarrollar estrategias conductuales y cognitivas para mejorar las Destrezas de comunicación en las personas.
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